La Salud Mental, un derecho necesario
Hola a tod@s, mi nombre es Leire Valero, Terapeuta ocupacional en Petra Lekuona, un centro de Matia ubicado en la pequeña localidad de Oiartzun (Gipuzkoa). Mi experiencia como terapeuta va unida al ámbito de la diversidad funcional y, en los últimos años, más concretamente a la salud mental. De ahí que, con motivo de la celebración del Día internacional de la Salud Mental, me gustaría contaros en primera persona y desde este campo de la terapia ocupacional que tanto me apasiona, algo de lo que he ido aprendido de las personas a las que tengo el placer de acompañar.
Reaprendiendo a mirar
Bajo mi experiencia relacional, las personas con problemas de salud mental son un colectivo que sufre una visión estereotipada que no casa con su realidad. Hablamos de personas que, quizás por su propia experiencia, siempre te tienen en cuenta, no discriminan a nadie. Son capaces de comprender y adaptarse a situaciones difíciles de una manera digna de admirar, y siempre se muestran dispuestas a incorporar a sus rutinas diarias nuevas actividades que enriquecen su día a día, y que parten de intereses particulares ligados a su proyecto vital.
Todo ello me lleva a pensar que si ellas son capaces de observarnos sin prejuicios ni clichés, ¿cómo es posible que nosotras no hagamos lo mismo?. Sin duda tenemos mucho que aprender de ellas.
¿Cómo afronté el cambio?
La primera vez que tomé contacto en este mundo llevaba conmigo mis miedos. Cosas que oía en mi entorno y que me hacían preguntarme si sería capaz de realizar una actividad productiva y significativa para y con ellas. ¿Podría empatizar con sus circunstancias?... Ese temor a no saber con quién te vas a encontrar, ni cómo iban a reaccionar estas personas a mi llegada.
Pero entones entré por la puerta del taller ocupacional y me encontré con un entorno que enganchaba. La radio puesta de fondo escuchando “Los 40 Principales”, unas personas entretenidas trenzando cestos de mimbre, otras con un pirógrafo, algunas más coloreando mándalas, o leyendo el periódico y realizando una mesa redonda. Se oían risas, conversaciones diversas y dispersas, en definitiva, vida. Un ambiente que invitaba a quedarse desde el primer momento.
En un instante todos mis miedos desaparecieron y me dije a mi misma: creo que voy a disfrutar de esta experiencia. A ver qué pasa.
Mi experiencia como profesional
Desde entonces y hasta ahora he estado en muchos ámbitos y entornos laborales trabajando como terapeuta ocupacional y cada ámbito es diferente pero valioso y enriquecedor, pero tengo que confesar que trabajar con las personas con problemas de salud mental es lo que más me ha llenado, tanto a nivel profesional como personal.
En estos momentos formo parte de equipo de la Unidad Residencial para Personas con Trastorno Mental Severo de Petra Lekuona. Somos una gran familia dedicada a apoyar el día a día de las personas a quienes acompañamos. Una labor que implica dar continuidad a un plan de vida individual y personalizado que dignifica y alienta el proyecto vital de todas y cada una de ellas.
Aquí trabajamos las actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, las habilidades sociales y conductuales en la comunidad, las actividades de ocio productivo, así como habilidades relacionadas con el ámbito laboral para poder avanzar juntos.
Acompañamos a las personas en conseguir mantener o recuperar lo significativo de sus vidas tanto dentro como fuera de la unidad. Por ello potenciamos actividades como:
- Ir con ellos de compras, secuenciando todas las partes de la tarea (desde cómo entrar, a que pasillos ir, cómo elegir los artículos, ver precios, utilizar la caja amiga…).
- Les enseñamos a utilizar recursos comunitarios como el Kzgunea, centros públicos a los que vamos todos los lunes para desarrollar habilidades digitales y un uso seguro de Internet.
- Actividades que hacemos en la casa, como nuestro taller de cocina de los viernes donde realizamos menús cada vez más elaborados y gracias al cual las personas a las que acompañamos se han convertido en auténticos críticos culinarios.
En definitiva, actividades de la vida diaria que son las que marcan el día a día de cualquier persona.
Tenemos muy presente que en cualquier momento los problemas de salud que estas personas tienen en su día a día los podemos tener nosotros en un futuro, vamos cogiendo nota y aprendiendo a vivir de otra manera diferente, de una manera que nos han enseñado ellos. Nos han enseñado a vivir desde el acompañamiento, desde el aquí y el ahora e intentando ser cada día mejores personas.
Somos gente con suerte, y como dice el lema del día mundial que no se nos olvide que…. mañana puedes ser tú.
Autora
Añadir nuevo comentario