- Esta encuesta es una de las acciones del proyecto Barner Hartu financiado por el programa «Adinberri».
- Se realizará a unas 1.650 personas del territorio.
- Permitirá realizar un diagnóstico de situación y necesidades de diversas realidades en torno a la inclusión y el envejecimiento teniendo en cuenta la perspectiva de género.
- Los resultados permitirán plantear estrategias que permitan avanzar hacia una sociedad inclusiva para las personas mayores gipuzkoanas.
Matia Instituto ha puesto en marcha, con la colaboración con la Diputación Foral de Gipuzkoa, y Fundación HURKOA, el “Estudio Barner Hartu”, Proyecto financiado y seleccionado en la convocatoria 2019 de la estrategia Adinberri de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
ESTA INICIATIVA TIENE el objetivo de proporcionar a planificadores y responsables de las políticas sociales, información detallada sobre dimensiones relativas a aspectos personales y del entorno, en las que vive la población de 60 años y más de Gipuzkoa, de la que se obtengan claves para avanzar hacia una sociedad inclusiva para las personas mayores.
COMO PARTE DEL ESTUDIO SE ESTÁ REALIZANDO UNA ENCUESTA a unas 1.650 personas de todo el territorio gipuzkoano que han sido seleccionadas al azar y cuya contribución es esencial para que las instituciones puedan conocer las necesidades y demandas en relación con la inclusión social de las personas mayores y buscarles soluciones.
En la encuesta se realizan preguntas sobre redes familiares, actitudes, opiniones, vivienda, salud y utilización de servicios sociales, entre otras cuestiones.
Sobre el estudio:
La exclusión social está recibiendo cada vez más atención en el ámbito de la gerontología. Este interés viene de la mano de una combinación de los patrones del envejecimiento demográfico, la inestabilidad sanitaria (ligada a la covid 19) social y económica actual y la susceptibilidad de estas cohortes de edad a las desigualdades crecientes.
Esta propuesta tiene un abordaje multidimensional de la exclusión distinguiendo dos perfiles diferenciados: por un lado, personas mayores que por motivos relacionados con el envejecimiento pueden encontrarse en situaciones de exclusión social; pero también, personas con itinerarios vitales marcados por la exclusión que están en proceso de envejecimiento, como es el caso de las personas con enfermedad mental o sin hogar. En ambos casos, sin olvidar la perspectiva de género que marca, sin duda, los diferente itinerarios vitales. El estudio de ambos perfiles, permitirá obtener una visión más completa de la situación de la exclusión y el envejecimiento en el territorio, así como generar estrategias de actuación con vistas a promover la inclusión de personas de edad.