- El encuentro sirve de cierre del proyecto europeo DCUM, una iniciativa que a lo largo de tres años ha explorado la práctica artística y cultural en el ámbito de la demencia en cuatro países de la UE: Dinamarca, Bélgica, Países Bajos y España.
- Durante la cita un grupo de personas con demencia, familiares y cuidadores han podido disfrutar de diversas actividades de fotografía y danza.
El pasado 8 de junio tuvo lugar en Donostia el evento “Arte y cultura, una ventana al sentido de vida en la demencia” que reunió en el auditórium del Aquarium de esta localidad a más medio centenar de personas de diferentes comunidades del Estado en el que se dieron a conocer los resultados y los materiales generados en el marco del proyecto 'Dementia in Cultural Mediation' (DCUM).
Esta iniciativa, que forma parte del programa europeo Erasmus+, se basa en la idea de que el uso de la cultura y las actividades culturales pueden ser una excelente vía para la inclusión social de las personas con demencia en su entorno próximo, favoreciendo la generación de redes sociales en el marco de dichas actividades, y contribuyendo a mejorar la autoestima, y la sensación de pertenencia y la alegría de vivir de estas personas.
En palabras de Mari Carmen Garmendia, presidenta del patronato de Matia, “La celebración de esta jornada marca un hito en el abordaje de la vida de las personas con demencia y su inclusión social desde mundos que parecen haberse ido distanciando de ellas, como son el arte y la cultura. Quienes acudimos apreciamos una gran identificación con lo que se planteaba. Tanto es así, que hubo personas que no pudieron contener su emoción, y al concluir el acto fueron muchas las que nos agradecieron la puesta en marcha de esta actividad, que desearíamos tenga continuidad cara a futuro”.
Por su parte, otro de las participantes en el evento, Iker Arrue, bailarín y director de la compañía AiDoProject, al concluir el acto señalaba: “Creo que hemos conseguido transmitir la esencia del trabajo que desarrollamos, a través de la música y el movimiento, en el proyecto Invisible Beauty.
Como bien describe James Rhodes en su biografía, la música tiene la capacidad de llegar a los últimos recovecos de nuestro corazón y nuestra mente. Bastan unas pocas notas para transportarnos al pasado, para revivir una emoción o un recuerdo o simplemente para cambiar nuestro estado emocional. Si, además, como bailarines que somos, conseguimos acompañarlo del resto de los elementos que compone la experiencia escénica (iluminación, vestuario, el propio movimiento en nuestro caso...) el impacto emocional en los participantes es muchísimo mayor y la experiencia se convierte en algo íntimo, casi personal. Hoy hemos intentado volver a compartir esto con los asistentes y ha sido hermoso observar sus reacciones”.
Iker agradeció también la oportunidad de participar en esta iniciativa, y es que, para el reciente premio de la danza de Gipuzkoa, “colaborar con entidades de la talla de Matia en proyectos como éste, es siempre revelador y para nosotros desde luego, un regalo”.
La jornada contó también con la participación de David Viñuales, socio fundador del Instituto 8 y docente en la Universidad de Barcelona, quien compartió algunas claves de su metodología con imágenes para trabajar con personas afectadas por Alzheimer y otras demencias.
Durante su exposición, los asistentes pudieron ver y testear cómo una simple y llana fotografía se puede convertir en una herramienta sorprendente para romper barreras comunicativas y atender cambios vitales.
Para David, la jornada resultó ser “una iniciativa con resultados inspiradores para una sociedad cada vez más visual y conectada.”
El proyecto DCUM
A finales de 2019 arrancaba en Odense (Dinamarca) el proyecto 'Dementia in Cultural Mediation', una iniciativa en el marco del programa europeo Erasmus+, que persigue recabar información sobre las dintintas actividades artísticas y culturales que involucran a personas con demencia en cuatro países de la Unión Europeo: Dinamarca, Bélgica, Países Bajos y España.
El proyecto se basa en la idea de que el uso de la cultura y las actividades culturales pueden ser un buen enfoque para favorecer la inclusión social de las personas con demencia en su entorno próximo. De ahí la importancia de mejorar las competencias y habilidades de los mediadores culturales que trabajan o tienen alguna relación con instituciones culturales (como bibliotecas, museos y organizaciones sociales) en las que existe el interés de organizan actividades culturales adaptadas a personas que viven con demencia.
Además de los socios, el proyecto ha establecido un grupo de referencia europeo, entre los que se encuentra Matia, compuesto por expertos altamente reconocidos en los campos de demencia y cultura en cada país participante, así como representantes de los usuarios finales, como: profesores, cuidadores informales, coordinadores de actividades y asesores de demencia, etc.
A lo largo del proyecto se han sucedido reuniones en la que los socios han intercambiado actividades, herramientas, ideas... para facilitar la generación de un kit de herramientas de fácil acceso, en el que se recopilan buenas prácticas, no solo para los socios participantes sino para todas las organizaciones y mediadores culturales interesados en nuevos métodos prácticos para la mediación cultural dirigida a personas con demencia. Este “Toolkit” consta de presentaciones y videos e imágenes instructivos, así como de guías para apoyar el uso de cada método.
Se pueden conocer más detalles del proyecto y de sus materiales resultantes en la web: https://dementiainculturalmediation.eu/