Lugaritz: un proyecto de ciudad que avanza en la innovación en envejecimiento en Donostia

Desde Matia en coherencia con la misión de nuestras dos Fundaciones (Matia Fundazioa y Matia Instituto), se considera necesario colaborar activamente en los proyectos de innovación que desde las administraciones territorial y local se están promoviendo en Guipúzcoa. En este contexto, se pone en marcha un proyecto en el ámbito del envejecimiento con un enfoque multidimensional coherente con su carácter innovador que comprende:

• Ubicación de un centro de investigación centrado en investigación gerontológica aplicada de carácter multidisciplinar.
• Construcción de un edificio en el que se integran 51 alojamientos para toda la vida de diferentes dimensiones y características destinados a personas que envejecen, en las que empieza a aparecer alguna enfermedad degenerativa. En este conjunto de alojamientos, todos ellos en régimen de alquiler, se incorporan, además, tres LivIng labs en los que se pueda hacer un seguimiento “in situ” de la eficacia de un conjunto de tecnologías y productos de apoyo que minimicen la discapacidad y faciliten la vida cotidiana de las personas.
• Un centro de día que dé respuesta a las necesidades del barrio y de los inquilinos de estas viviendas.

Los tres edificios se encuentran construidos de manera que se integran en el barrio, adecuándose la altura de las viviendas colindantes y con una plaza que integra a los mismos.

Entendemos que iniciativas de este tipo sirven para avanzar en el proceso de consolidación del proyecto Donostia Lagunkoia dirigido a personas que envejecen, pero también al conjunto de la ciudadanía, identificando oportunidades acordes con sus necesidades, deseos y preferencias.

Este proyecto se remonta al año 2009 bajo la denominación de Polo de Innovación Lugaritz. Se hace realidad una década más tarde, por lo que ha exigido una reformulación para adaptarse a las actuales necesidades y tendencias en materia de envejecimiento que actualmente afloran con fuerza en Europa y por lo tanto en Gipuzkoa. Cuenta también con el apoyo económico derivado de una subvención nominativa que gestiona el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar social a través del IMSERSO.

Aspectos destacables del proyecto:

• Es una iniciativa de carácter piloto que pretende generar conocimiento en torno a diferentes alternativas de alojamiento y vida cotidiana para personas en proceso de envejecimiento, muy especialmente cuando aparecen enfermedades degenerativas.
• Es un proyecto de innovación precisamente por su faceta investigadora. Es la primera experiencia de este tipo que se pone en marcha en Euskadi y necesitamos generar conocimiento sobre ella que ayude a valorar su posible réplica y generalización. En consecuencia, este proyecto se abordaría desde una perspectiva longitudinal, intentando obtener resultados a lo largo del tiempo sobre aspectos como:
  • Los efectos en las personas y su calidad de vida, desde una perspectiva comparada en relación con otros modelos de alojamientos, así como su impacto en la percepción de soledad, asunto que actualmente preocupa a todas las sociedades desarrolladas.
  • Impacto de este tipo de diseño en la vida de personas que necesitan ayuda o análisis de consumo de recursos en el marco de un estudio coste/efectividad.
  • Percepción de la ciudadanía sobre este tipo de alojamientos.
• Esta modalidad de afrontar la generación de conocimiento está basada en la metodología conocida como investigación - acción participativa, promovida con fuerza por los organismos internacionales, que optan claramente por la experimentación en entornos reales.

En consecuencia, el proyecto pretende, desde la evidencia científica, hacer realidad el paradigma “vivir en casa o como en casa”, difundido desde diversas administraciones europeas y otras organismos internaciones que invitan a desarrollar y evaluar experiencias de alojamientos para personas que necesitan ayuda, diferentes a los modelos residenciales clásicos que presentan una excesiva carga “institucional”, y que no son ni elegidos ni deseados por sus potenciales usuarios. En definitiva, un modelo de vida doméstico, personalizado, que da respuesta a la heterogeneidad consustancial al grupo de población constituido por personas que envejecen y que en un porcentaje importante pueden necesitar ayuda al final de su vida.

Estamos ante un PROYECTO DE CIUDAD que situara a Donostia y a Gipuzkoa entre los territorios comprometidos con las sociedades longevas que comenzamos a vivir y sus consiguientes necesidades.